ARTICULOS DE OPINION


Revista digital de arte, cultura y opinión en Alicante. Enlace con POESIA PALMERIANA. En estas páginas no podemos estar ajenos a lo que pasa en España ni en el mundo. Dirigida por el escritor, poeta y pintor Ramón PALMERAL. Los lectores deciden si este blog es bueno, malo, o merece la pena leerlo. El periodismo consiste en decir lo que a algunos no les gustaría leer.

viernes, 10 de noviembre de 2017

Forcadell y el resto de la Mesa optan por la Constitución para evitar la cárcel


Forcadell y el resto de la Mesa optan por la Constitución para evitar la cárcel
La presidenta del Parlament, Carme Forcadell, el exvicepresidente de la Mesa, Lluís Corominas, y dos otros miembros, Lluís Guinó y Anna Simó (LVD)




Todos los miembros de la Mesa del Parlament optaron este jueves por ir por la ‘vía Vila’, es decir, acatar la Constitución, y no salirse del marco legal, esto es, dejar a un lado la estrategia independentista, con el único objetivo de no acabar como el ex vicepresidente de la Generalitat, Oriol Junqueras, y otros siete ex consellers, en prisión incondicional.

El primero en utilizar esta estrategia fue el ex conseller de Empresa, Santi Vila. En su caso, su opción comenzó 24 horas antes de que el Parlament declarara la independencia al dimitir de su cargo. Igualmente, fue querellado junto al resto de ex miembros del Govern y de la Mesa del Parlament por un presunto delito de rebelión. En su declaración ante la juez de la Audiencia Nacional Carmen Lamela, Vila decidió defender las vías legales y renunciar a seguir luchando por la independencia de Catalunya dentro de la ilegalidad.

La presidenta del Parlament, Carme Forcadell, y el resto de los cinco miembros de la Mesa optaron ayer por la única estrategia posible para evitar la cárcel ‘sine die’. Llegaron ante el magistrado del Tribunal Supremo Pablo Llarena -por su condición de aforados-, acataron la Constitución, se opusieron a la vía unilateral para conseguir la independencia, y aseguraron abandonar la ilegalidad.

Carme Forcadell La vía blanda
Ante estos argumentos, el instructor optó por la vía más blanda y dejarles a todos en libertad excepto a Forcadell, aunque lo hará en cuanto pague una fianza de 150.000 euros, que se estima consiga reunir en las próximas horas. El magistrado del Supremo optó por rebajar considerablemente las pretensiones de la Fiscalía, que no se creyó la declaración de intenciones de los investigados, y que calificó de “mendaces”.
El magistrado les ha dado una segunda oportunidad. A pesar de reconocer la gravedad del delito, ha preferido esperar a ver si retoman el plan soberanista. Advierte que si la próxima legislatura, tras las elecciones del 21 de diciembre, se convierte “en un ilegal proceso constituyente” las medidas serán modificadas.
Según recoge el auto, todos los querellados, “no es que hayan asumido la intervención derivada de la aplicación del artículo 155 de la Constitución, sino que han manifestado que, o bien renuncian a la actividad política futura o, los que desean seguir ejerciéndola, lo harán renunciando a cualquier actuación fuera del marco constitucional”.
La mirada hacia Lamela
Su decisión hace llevar directamente la mirada a la juez Lamela, que una semana antes acordó el ingreso en prisión de Junqueras y otros ocho ex consellers y ordenó la detención e ingreso en prisión del ex presidente catalán, Carles Puigdemont, y otros cuatro ex miembros del Govern fugados a Bélgica.
Aunque la línea de defensa dista mucho entre los ex miembros del Govern enviados a prisión incondicional con la de la Mesa del Parlament, el magistrado del Supremo ha optado por descafeinar la querella de la Fiscalía. Apunta ya a que la violencia exigible para el delito de rebelión podría no quedar finalmente acreditado, lo que llevaría obligatoriamente a calificar los hechos por sedición; considera que no se puede interpretar la existencia de riesgo de fuga y menos aún de destrucción de pruebas; y señala que la utilización de fondos públicos para la organización del referéndum del 1 de octubre no está acreditado como para fijar la fianza de 6,2 millones de euros en concepto de responsabilidad civil que reclamaba la Fiscalía en su querella y que Lamela, sin embargo, sí fijó.


Forcadell y Nuet, los dos extremos
A pesar de todas las limitaciones fijadas por Llarena, sí establece unas bases para seguir investigando a los miembros de la Mesa del Parlament. Es más, para Lluís Corominas, Lluís Guinó, Anna Simó y Ramona Barrufet fija su libertad con siete días de margen para pagar una fianza de 25.000 euros cada uno. Además, se les ha fijado la retirada del pasaporte, la prohibición de salir del país y comparecencias semanales ante el Juzgado.

Finalmente, en el caso de Joan Josep Nuet ha quedado en libertad sin medidas cautelares. Cabe recordar que la Fiscalía no había pedido prisión para el coordinador general de EUiA dado que el pasado 27 de septiembre había votado en contra de la admisión a trámite de las dos propuestas para votar la declaración de independencia. Respecto a él, el magistrado señala que la valoración inicial respecto del resto de querellados “no es en absoluto proyectable” a Nuet.

Respecto de Forcadell, el magistrado considera que su papel en toda la estrategia soberanista es muy distinto al del resto de aforados investigados, y por eso las medidas contra ella son más gravosas. A su juicio, presenta “una actuación principal en los hechos que se investigan, tanto por su intervención medular durante todo el largo proceso que contemplamos, como por la intensa repercusión que su propio liderazgo ha tenido en cada uno de estos periodos”.
Forcadell perfiló la hoja de ruta
Además, es esencial el hecho de que antes de ser presidenta del Parlament fuera presidenta de la Asamblea Nacional Catalana (ANC), “desde cuyo mandato perfiló, asumió, y comprometió, una hoja de ruta que pasaba por la concienciación y movilización colectiva cuya instrumentación se analiza”.
Para Llarena, su actuación fue esencial, “que vino seguida por su presidencia del Parlament de Catalunya, en la que se perfiló el método que se iba a seguir para declarar la independencia, y que aportó el aparente soporte legislativo que el proyecto necesitaba, fundamentalmente, las Leyes del referéndum y de desconexión, que condujeron a la declaración de independencia, y que hubieran conducido a la convocatoria de unas elecciones constituyentes de no haberse autorizado por el Senado y aplicado por el Gobierno, las medidas que permitieron placar el objetivo secesionista”.

Negociar con el Gobierno, “irreal”
A pesar las limitaciones establecidas en el auto, en comparación con las solicitudes de la Fiscalía, Llarena sí establece claros indicios de ilegalidad. Así, sostiene que el discurso del Govern de que su objetivo era buscar una vía negociada con el Gobierno central era “irreal”.
“El supuesto pacto de independencia es incompatible con lo que realmente se hizo, pues se optó por realizar un referéndum, sabiendo de su ilegalidad y de la prohibición de su celebración”. Sabían que si el resultado mayoritario de los votantes era favorable a la independencia, “se iba a proceder, inexorablemente y sin negociación ninguna, ala constitución de una república independiente, tal y como finalmente aconteció, por más que se introdujera como declaración previa ala que era la Resolución jurídica del Parlament”.
Una movilización ciudadana esencial
”La idea de actuar con sujeción a un pacto es irreal. Por ello, el único instrumento restante para lograr la independencia, es el que tuvo que orientar la actuación que se investiga”, añade.
Para el magistrado, los impulsores del plan soberanista quisieron imponer una aceptación política. “Dado que la viabilidad política de una nueva realidad nacional no podía lograrse con la actuación legislativa y gubernativa desplegada, se muestra factible que se contemplara que el resultado sólo sería alcanzable mediante la incorporación de un nuevo elemento, concretamente, una movilización ciudadana”.

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...................................NUEVO IMPULSO
Llega un momento que no cabe más que apechugar con la realidad, el independentismo solo tara problemas a los catalanes. El Estado español es quine manda. Manifestarse no va cambiar las decisiones juidciales.
En cuanto se les aprecie que no acatan la Constitución, les qauedan dos caminos de la cárcel o Bruselas.

 Respecto de Forcadell, el magistrado considera que su papel en toda la estrategia soberanista es muy distinto al del resto de los miembros de la Mesa del Parlament aforados investigados, y por eso las medidas contra ella son más gravosas. A su juicio, presenta “una actuación principal en los hechos que se investigan, tanto por su intervención medular durante todo el largo proceso que contemplamos, como por la intensa repercusión que su propio liderazgo ha tenido en cada uno de estos periodos”.